Durante años, la propaganda franquista ha intentado presentar a Franco como un paladín de la neutralidad que, gracias a su astucia política, habría evitado la participación española en la Segunda Guerra Mundial. Hoy sabemos que solo las altas pretensiones del caudillo, hacerse con buena parte del imperio francés en el norte de África, impidieron una nueva aventura belicista. El artículo es una descripción de la primera visita que Franco realizó a la ciudad Almería en mayo de 1943. El generalísimo se estaba dando un baño de masas por toda Andalucía pero fue en Almería donde pronunció el famoso discurso de la paz con el que realizó un giro copernicano en cuanto a su postura frente al conflicto mundial. Franco marcaba distancias con sus antiguos aliados del Eje y hacía votos por un acuerdo entre los países de Europa Occidental recordando que el verdadero enemigo era la Unión Soviética. El artículo recoge un resumen de los elogios que el diario Yugo dedicó al Jefe del Estado y también una pintoresca iniciativa, hoy olvidada, para presentar a Franco como candidato al Nobel de la Paz, presentada por una organización noruega.
Franco, ‘el Pacifista’. Relato de la primera visita del dictador a Almería
Revista de Hespérides
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