Mónica Fernández Amador
Las elecciones del 3 de abril de 1979 significaron un hito fundamental del proceso de transición en el ámbito local. Las nuevas corporaciones municipales contribuyeron de manera decisiva al asentamiento de la cultura democrática en la vida cotidiana de los pueblos y ciudades, poniendo de manifiesto que la convivencia pacífica entre distintos sectores ideológicos era posible y positiva.
No obstante, para romper con la excesiva mitificación que rodea a este período, en las páginas del presente trabajo se realiza un recorrido por los principales conflictos surgidos en el seno de algunos ayuntamientos de la provincia de Almería durante el mandato de 1979-1983, cuya característica más destacada fue la ruptura de los pactos postelectorales establecidos por las organizaciones de izquierda para apartar de las alcaldías al partido gubernamental. La historia local se configura así como imprescindible para conocer cómo transcurrió el mandato de las primeras corporaciones democráticas, consideradas como unas de las piezas clave para el verdadero éxito de la Transición.