Durante la II República el republicanismo de izquierdas estuvo representado por distintas organizaciones políticas. En el primer bienio, el “Bienio reformador”, los partidos que se disputaban el liderazgo de ese sector ideológico fueron Acción Republicana (AR) y el Partido Republicano Radical Socialista (PRRS).
Aunque es verdad que, a nivel local, el PRRS gozó de una situación hegemónica al comienzo de la II República y que, a nivel nacional, en el período comprendido entre 1931 y 1933, Acción Republicana fue el eje de la coalición de gobierno liderada por Azaña; no es menos cierto, sin embargo, que tras el fracaso de los republicanos de izquierdas en las legislativas de noviembre de 1933, los grupos progresistas iniciaron un proceso de unificación que culminó con la creación de dos nuevas formaciones políticas: Izquierda Republicana, dirigida por Manuel Azaña, y Unión Republicana, liderada por el ex-radical Diego Martínez Barrio.
En el ámbito de las investigaciones sobre las organizaciones políticas en la Almería contemporánea, el trabajo analiza la implantación y desarrollo en la provincia de Almería del partido dirigido a nivel nacional por Manuel Azaña sin olvidar aclarar su origen, el ideario y sus estatutos. Asimismo analiza su afiliación y la procedencia socio-profesional de dirigentes y militantes de base, su participación en la dinámica política local, las crisis internas, las disensiones en las instituciones, las coaliciones electorales en las que participó con motivo de los distintos comicios, las causas de su desaparición y, finalmente, su unificación con los republicanos progresistas almerienses en Izquierda Republicana a partir de 1934.