Alejandro Gómez Spencer es un nombre prácticamente desconocido para el gran público, y tan solo a aquellos que profundizan un poco en la Historia de la Aeronáutica militar española puede resultar reconocible. Sin embargo, este almeriense, gozó de una merecida fama en los años veinte y treinta del pasado siglo XX. Se trató de un gran piloto y científico que formó parte de una gran generación de aeronautas españoles que pusieron las bases de la Fuerza Aérea española. Alejandro nació en Almería en 1896 en el seno de una tradicional familia burguesa. En 1920 ingresa en la Aeronáutica militar, procedente del Arma de Caballería, en lo que se conoce como la gran promoción del general Echagüe, jefe del Servicio y decidido impulsor del arma aérea española. Gómez Spencer demostró desde bien pronto sus capacidades como piloto lo que le hizo ser nombrado, una vez obtenido el título, profesor en esa misma Escuela de Vuelo. A partir de ese momento compaginó los periodos de docencia con los de piloto de pruebas de distintas aeronaves sin descuidar las acciones de guerra pues fue destinado en varias ocasiones al Protectorado Español en Marruecos. La fama y el reconocimiento del gran público le llegó en 1923 cuando se convirtió en el piloto del autogiro C-4 diseñado por Juan de la Cierva. Este éxito catapultó a ambos a la fama nacional, fama que Gómez Spencer acrecentaría con la consecución de diferentes records nacionales de altitud.
Entre 1932 y 1935 estuvo a cargo de la Oficina de Mando del Servicio de Aviación. Al comienzo de la Guerra Civil se hizo cargo, por orden del Gobierno, del Aeródromo de Alcalá de Henares impidiendo su alzamiento y coadyuvando al sometimiento de las tropas sublevadas en la ciudad. A pesar de su actuación fue detenido poco después e ingresado en la Checa de San Antón. Sin duda el tratarse de un militar profesional sin actividad política levantaba ciertos recelos en las milicias, a lo que hay que añadir la nacionalidad italiana de su esposa y que su suegro, Luigi Barzini, fuese un senador italiano amigo de Mussolini. Liberado poco tiempo después fue destinado a Murcia donde se hizo cargo de la Escuela de Vuelo de San Javier. Allí, se encargó de la formación de varias promociones de pilotos republicanos que realizaron una brillante actuación durante la Guerra Civil. A finales de 1937 es nuevamente arrestado y trasladado a Barcelona. Liberado en 1938 mantuvo diversos cargos como Director General de Armamento. En febrero de 1939 abandonó España camino de Francia. Con posterioridad sería detenido y juzgado en España.
Alejandro Gómez Spencer. Maestro de pilotos republicanos en la guerra civil española
Jornadas La Guerra Civil Española 80 años después. Las investigaciones en la provincia de Almería
Almería, 9 y 10 de noviembre de 2016
compartir
Email
Imprimir